lunes, 10 de junio de 2013

A un cuerpo en medio de la Historia

Hubo quienes le llamaban
el muro que dividía los frentes,

otros le decían
montaña
viento suave
lluvia
brisa

eventualmente llegarían estar de acuerdo
en que al pie del muro
o de la montaña
acariciados por un viento suave
los muertos se apilaban
en silencio.

Tardaron también en descubrir
que aquellos
los que se apilaban sin poder decir nada
no llegaron hasta ahí siguiendo sus propias huellas,
fueron lanzados como se lanzan los troncos
cuando se parte un árbol,
muchos árboles,
y en medio del bosque se abandona un claro.

No fueron pocos los días
en que ignoramos que hacer
con las respuestas.

Nadie pidió paciencia al bosque,
las preguntas ardían en el fuego
al pie de la montaña.



No hay comentarios: